Desde que la primera película dirigida por Michael Bay llegó a los cines en 2007, los Transformers han tenido una larga y agotadora carrera en los cines. En los últimos 16 años se han rodado seis películas de acción real de Transformers, pero después de Transformers: Dark of the Moon en 2011, cada entrada posterior en la franquicia ha recaudado menos y menos. Ahora, Paramount ha cambiado de marcha incluyendo a los Maximals en Transformers: Rise of the Beasts, pero ¿es suficiente para insuflar nueva vida a la franquicia? La respuesta es, sencillamente, no.
Si nos fijamos en el declive en taquilla de la franquicia Transformers, es casi como si la acción sin sentido no fuera suficiente para mantener al público entretenido. Dado que muchos fans de Transformers tienen ahora más de 40 años, parecería lógico que el público quisiera que estas películas se ciñeran más al material original e incluyeran tramas que tuvieran sentido para cualquier persona de más de 10 años. Paramount fue en contra de esta línea de pensamiento con Star Trek y GI Joe, y la compañía sigue cometiendo estos mismos errores con los Transformers.
Transformers: Rise of the Beasts toma algunos aspectos de la película de animación de 1986, y los combina mal con la serie de dibujos animados Beast Wars. La película transcurre principalmente en 1994, antes de cualquiera de las películas de Bayformers. Sin embargo, aunque Bumblebee se presentó como una precuela, en realidad era más bien un reinicio, y Rise of the Beasts es la segunda película de la franquicia reiniciada.
Unicron (Colman Domingo) es el villano que aparece en segundo plano durante la mayor parte de la película. Sin embargo, a pesar de los evidentes paralelismos con la película de animación, en la que Unicron era una de las mayores amenazas a las que se habían enfrentado los Autobots, en Rise of the Beasts no es más que un personaje secundario. Tiene un puñado de líneas y nunca supone una amenaza suficiente para que el público se interese por él.
Incluso si dejamos de lado la película de animación, muy superior, la versión de los Bayformers de Megatron era más amenazadora y ominosa que cualquier cosa que hiciera Scourge en Rise of the Beasts. Con dos villanos mediocres, nunca hubo peligro real. Incluso algunos de los acontecimientos más interesantes de la trama quedaron minimizados por la falta de gravedad. Claro, el mundo está en peligro, y el universo será el siguiente, pero limitarse a decir unas líneas de diálogo afirmando tales cosas no va a hacer que parezca una amenaza mayor. Al final de la película, estaba claro que esas palabras no tenían ningún peso.
Peter Cullen vuelve a ser la voz de Optimus Prime, pero incluso el legendario líder de los Autobots parece un héroe anodino y anodino en El origen de las bestias. Pete Davidson aporta algo de ligereza como Mirage, en uno de sus mejores papeles en años, pero no es suficiente para que Rise of the Beasts supere la mediocridad. Lo mismo puede decirse de Michelle Yeoh como Airazor. Aunque no es su mejor papel, cumple admirablemente con los diálogos genéricos que se le asignan. Y para una película llamada Rise of the Beasts, algunos de los Maximals ni siquiera tenían diálogo.
Los fans de Transformers G1 ni siquiera deberían molestarse en aparecer. Mirage es un Porsche en lugar de un F1, lo cual no sería un cambio terrible, salvo que Jazz también es un Porsche. ¿Por qué hacer que Mirage sea el mismo vehículo que Jazz cuando hay un número casi infinito de deportivos entre los que elegir? Peor aún es el caso de Wheeljack, al que se pudo ver en las escenas de Cybertron durante Bumblebee en su correcta representación de G1, pero que de algún modo adquiere acento peruano en Rise of the Beasts, transformándose en un VW Bus en lugar de su correcta apariencia de coche deportivo.
Una cosa es cambiar los vehículos por motivos de licencias y monetarios. Con todos los Autobots que Paramount tiene para elegir, tampoco hay una buena razón para hacer otros nuevos. Pero cuando los cambios son tan drásticos que el personaje resulta irreconocible para los fans, el problema es enorme. Por desgracia, es un problema que Paramount ha apoyado durante toda la serie de películas de acción real de Transformers.
Ninguno de estos problemas se ve favorecido por el hecho de que Rise of the Beasts cuenta con cinco guionistas diferentes, la mayoría de los cuales son escritores con un historial mediocre, y bajos ingresos en taquilla. La conclusión es que Paramount no quiere o no puede producir una película de Transformers que respete la franquicia. Quitando a Peter Cullen, esto sería Transformers sólo de nombre. Hasta que eso cambie, ninguna de estas películas merecerá el tiempo de nadie, y los beneficios en taquilla seguirán estando muy por debajo de las expectativas.
Artículo traducido y adaptado de Geek News Network