En la mayor parte de Estados Unidos, GameStop es sólo un lugar para comprar videojuegos. En Wall Street, sin embargo, se ha convertido en un campo de batalla entre pequeños y grandes inversores.
Los fondos que sirven a la élite financiera están empezando a marcharse derrotados. Las grandes apuestas que hicieron de que las acciones de GameStop caerían salieron mal, dejándoles frente a miles de millones de dólares en pérdidas colectivas. Toda la acción salvaje empujó las acciones de GameStop hasta 380 dólares el miércoles, frente a los 18 dólares de hace unas semanas.
La asombrosa toma de poder da cierta validez a los inversores con menos recursos, muchos de los cuales se animan mutuamente en Reddit y operan con acciones por primera vez gracias a los corredores de bolsa que ofrecen aplicaciones de negociación gratuita. También ha dejado a más inversores en Wall Street preguntándose si el mercado bursátil se encuentra en una peligrosa burbuja a punto de estallar, ya que AMC Entertainment, Bed Bath & Beyond y otros valores deprimidos se disparan también de repente.
Las plataformas de negociación restringen las apuestas por GameStop y otras acciones de Reddit, lo que ha desatado la indignación y la ira de los legisladores. Dos firmas de inversión que habían apostado por la caída de las acciones de GameStop, han tirado esencialmente la toalla. Una de ellas, Citron Research, reconoció el miércoles en un vídeo de YouTube que deshizo la mayor parte de su apuesta y asumió "una pérdida del 100%". Pero Andrew Left, que dirige Citron, dijo que eso no cambia su opinión de que las acciones de GameStop acabarán bajando.
Antes de su reciente explosión, las acciones de GameStop llevaban mucho tiempo con problemas. La empresa lleva años perdiendo dinero a medida que las ventas de videojuegos se realizaban cada vez más a través del canal online, por lo que sus acciones han venido cayendo durante seis años consecutivos antes de repuntar en el 2020.
Esto empujó a muchos inversores profesionales a hacer apuestas de que las acciones de GameStop bajarán aún más. Esta estrategia llamada "ventas en corto", consisten en que los inversores toman prestada una acción y la venden con la esperanza de volver a comprarla más tarde a un precio más bajo y embolsarse la diferencia. GameStop es uno de los valores más vendidos en Wall Street.
Pero sus acciones empezaron a subir con fuerza a principios de este mes después de que un cofundador de Chewy, el vendedor online de artículos para mascotas, se uniera al consejo de administración de la empresa.
Entretanto, los pequeños inversores se exhortan mutuamente en Internet para que las acciones de GameStop sigan subiendo.
Las discusiones están llenas de sarcasmo, autodesprecio y emojis de cohetes que significan la creencia de que las acciones de GameStop volarán a la luna.
No hay una razón primordial por la que GameStop haya atraído a esta cabalgata de pequeños y primerizos inversores, pero hay un claro componente de venganza contra Wall Street en las comunicaciones online.
"Los mismos ricos que provocaron el desplome del mercado en 2007/08 siguen en el poder y continúan manipulando el mercado para enriquecerse aún más, nosotros sólo estamos recuperando nuestra parte justa", escribió un usuario en Reddit.
"Oye mamá, no puedo subir a cenar", escribió otro usuario. "Estoy llevando a la quiebra un fondo de cobertura de 10 cifras con los chicos".
A medida que las ganancias de GameStop aumentaban y los vendedores en corto se apresuraban a salir de sus apuestas, tenían que comprar acciones para hacerlo. Eso aceleró aún más el impulso, creando un bucle de retroalimentación. Hasta el martes, los vendedores en corto de GameStop ya habían perdido más de 5.000 millones de dólares en 2021, según S3 Partners.
Gran parte de los profesionales de Wall Street siguen siendo pesimistas en cuanto a que las acciones de GameStop puedan mantener sus inmensas ganancias. Es poco probable que la empresa empiece a obtener beneficios lo suficientemente grandes como para justificar su valoración de mercado de 22.200 millones de dólares en breve, según los analistas. Las acciones cerraron el miércoles a 347,51 dólares. Los analistas de BofA Global Research elevaron el miércoles su precio objetivo a 10 dólares.
Toda esta manía está suscitando cierta preocupación por el hecho de que los inversores estén asumiendo riesgos excesivos, y los periodistas preguntaron el miércoles al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, si los movimientos de la Fed para apoyar a los mercados durante la pandemia están contribuyendo a elevar demasiado los precios de las acciones.
Powell restó importancia al papel de los bajos tipos de interés y apuntó a las expectativas de los inversores sobre las vacunas COVID-19 y a los mayores estímulos de Washington a la economía como motores de los precios récord de las acciones.